Hablamos de Vieja entrepierna humeante
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Tres años después
Tres años después de la noche en el Motel Elegante, Loti despierta en el catre del refugio en el desierto de Tabernas sin saber exactamente qué hora es. No hay reloj, pero por la posición del sol calcula que son más o menos las dos de la tarde. Para variar se levanta con dolor de cabeza y se dirige al aseo, acciona la palanca de la bomba de agua y trata de lavarse la cara y enjuagarse la boca. Se sirve una taza de un café que sabe a mierda y estrena el último paquete de cigarrillos que queda. Supone que no le durará más de día y medio.
Como todo lo demás. Ya apenas hay garrafas de agua, latas de comida, bidones de combustible para el generador, medicinas ni productos de higiene. Daría un puto pulmón por un tubo de dentífrico, una pastilla de jabón y unas cuantas compresas. Cuando bebe el café está junto a la ventana, echando un vistazo afuera, cuando come fabada en lata, normalmente fría, está asomada a la ventana; cuando no sabe qué coño hacer, se sienta en la cama o se apoya en la pared mirando por la puñetera ventana. No necesita hacer ejercicio. Se pasa las horas leyendo libros por tercera o cuarta vez, escuchando el Walkman que recogió al escabullirse del motel e inspeccionando y toqueteando la maleta de plástico con pegatina del Club-Discoteca Jumbo 747 de San Sebastián de los Reyes situada unas veces debajo del catre y otras en el zulo. Preguntándose muy a menudo de qué cojones sirve querer empezar una nueva vida robándole su dinero a un chulo con malas pulgas si luego dicha vida va a consistir en un confinamiento aislado y forzoso en el que el dinero sigue siendo igual de inútil que cuando no lo tenía».
AVANCE DEL CONTENIDO EXTRA
Es la primera novela de Barea. La del premio de Valencia, con toda su pompa, que detalla en el vídeo que acompaña al capítulo 22.
Ahora, en esta conversación, desmenuza las claves, los detalles, los secretos y las entrelíneas de la novela.
- ¿Cómo y cuándo surge Vertedero?
Conocía Sanlúcar y sabía que la cara B de algunos de sus enclaves podían funcionar muy bien para una novela. Allí me llevé esta.
El protagonista, Javi, un don nadie, se plantea en el talego que ya que solo va a poder ser un criminal pues se lo va a tomar en serio. Y la lía. El tipo, sin embargo, este yonqui que malvive, tiene mucha sensibilidad artística.
En el texto voy jugando con la primera persona y con la tercera persona, como si fueran respuestas en un interrogatorio.
CAPÍTULO Y CONTENIDO EXTRA ÍNTEGROS EN LA APP BLACK & NOIR
